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Gabriela de León
Natalie Chinchilla
Iris García
Jennifer Portillo, Patricia Aldana y Ana Lucía Asturias
Todos recordamos más de algún video sobre los efectos de la contaminación que se ha hecho viral; puede ser acerca de un oso polar, tal vez de una tortuga o inclusive de un bosque entero. No importa cuál sea el video que recuerdes porque todos tiene algo en común: son consecuencia lógica del mal manejo de la basura y el calentamiento global.
El manejo de desechos es un problema de nivel internacional y en los últimos años se ha acrecentado hasta un punto alarmante. Los residuos están afectando negativamente los ecosistemas y la biodiversidad, poniendo en peligro nuestro hogar, la Tierra. Y es que, recordemos que de los restos que generamos el 30% no se recolecta, el 19% se recupera y tan solo un 11% se traslada a instalaciones de recuperación de energía (Lozano, 2018)
Esto se ve reflejado en Guatemala, donde se producen 3 millones 285 mil 716 toneladas de residuos sólidos al año. El vertedero de la zona 3 es uno de los más grandes de Centroamérica, recibiendo 3 mil toneladas de basura a diario (Waste Atlas: s.f). A pesar de esto, el país cuenta con un acuerdo de manejos de desechos, aun así, la conciencia social respecto a esta parte de la constitución es casi nula. Se podrían expandir las leyes para el manejo de basura, pero el problema va a seguir aumentando. Sin embargo, tenemos una alternativa: el reciclaje.
Según la Real Academia de Lengua Española (RAE;2021), el reciclaje se define como “someter un material usado a un proceso para que se pueda volver a utilizar”. En otras palabras, es el proceso donde algún objeto que ha sido previamente utilizado es sometido a una serie de pasos con el fin de obtener un nuevo producto. Esto permite dar una nueva vida a los artículos y hace un mejor uso de los recursos y los desechos, lo cual es clave para salvaguardar la biodiversidad en el planeta.
Por ello la UNESCO declaró en 1970 el 17 de mayo como fecha oficial para el Día Mundial del Reciclaje. Este surge como una oportunidad para reorientar a la sociedad en la mejora del estado actual del medio ambiente por medio de las 3 R’s (reducir, reutilizar y reciclar). (Reciclame; s.f)
Este es un día perfecto para informarnos y concientizarnos sobre cómo el incorrecto manejo de los desechos afecta de sobremanera a la biosfera y a los seres vivos que la habitan. Debemos buscar una forma de contribuir a la disminución del cambio climático y proteger nuestro hogar.
Como ejemplo, podemos empezar a utilizar envases retornables. Según las estadísticas del Departamento de Reciclaje de Vidriera Guatemalteca, S.A (VIGUA), Cada mes 1.7 millones de toneladas métricas de vidrio (6.8 millones de envases) se convierten en materia prima para producir nuevas botellas. Un solo envase retornable evita 39 envases desechables y puede ser reciclado (Lozano, 2018). De igual manera, podemos organizar nuestra basura y llevarla a centros de reciclaje como los “Municentros de reciclaje” puestos por la municipalidad de Guatemala.
En Colegio Monte María, las vicepresidentas del consejo estudiantil, en conjunto con María Fernanda Bracamonte están promoviendo el cumplimiento de los eco-retos. Estos tienen como intención clasificar de manera correcta los desechos sólidos que se manejan dentro de las instalaciones del Colegio. Los eco retos comenzaron el 28 de marzo y ayudan a la correcta clasificación de basura como: plástico, latas, desechos orgánicos y papel.
¡Cuidemos nuestro hogar!
