Frida Figueroa y Paulina Orozco
Sofia Godoy
Jennifer Portillo, Patricia Aldana y Ana Lucía Asturias
Durante años, los científicos han advertido sobre el cambio climático y las consecuencias que este trae, como el aumento de temperatura, cambio en los patrones del clima, escasez de agua y sequías en zonas húmedas, entre otros. A pesar de dar a conocer los efectos negativos, el ser humano no ha realizado cambios significativos en el medio y de seguir así, dentro de pocos años se estará superando los 1.5 °C de temperatura.
El pasado 4 de abril se llevó a cabo en diferentes países una protesta titulada “rebelión de los científicos” donde estos expusieron su pensar respecto a la incompetencia de los gobiernos por la poca importancia que le dan al medio ambiente. Varios de ellos afirmaron que la publicación de artículos no era de utilidad para darse a escuchar. Victor de Santos, uno de los científicos que se encontraba en la protesta, declaró lo siguiente: «En este momento la comunidad científica se ha dado cuenta de que no es suficiente con la publicación de artículos. Llevamos décadas haciéndolo y no se nos escucha. Ya no queda otra, no hay alternativa que pasar a la desobediencia».
Otros personajes se involucraron en la manifestación como, Elena González Egea, una astrofísica especializada en la búsqueda de vida en otros planetas, quien se dio cuenta y anunció que la humanidad no iba a vivir lo suficiente para ser testigos de tal hallazgo debido a la crisis climática.
Individuos que trabajan en la NASA salieron a protestar el 6 de abril en Los Ángeles en la entrada del banco Chase. «Vamos a perderlo todo, no estamos mintiendo, no estamos exagerando gente, esto es muy malo […] más y más científicos y más gente van a empezar a unirse a nosotros, esto es para todos los niños en el mundo, para toda la gente joven, todas las personas del futuro, esto es mucho más grande que cualquiera de nosotros» declaró el científico Peter Kalmus. Como era de esperarse, la policía de Los Ángeles no se quedó de brazos cruzados e hicieron presencia en el lugar de protesta con 100 agentes antidisturbios.
Es momento de que la sociedad actúe y empiece a realizar cambios en su estilo de vida, reduciendo la cantidad de agua para bañarse; eliminando el correo no deseado para evitar la producción innecesaria de CO2, reciclando materiales, reduciendo el consumo de plástico e intentando sustituirlo por un componente biodegradable o eco amigable.
Estas acciones y movimientos nos recuerdan al Día de la Tierra que se celebra el 22 de abril, el cual tiene sus orígenes en Estados Unidos, en 1968 cuando un grupo de estudiantes lucharon para darle voz a los científicos que advertían del daño ambiental. Sin embargo, no fue hasta 1970 que se dio apertura a este evento cuando Gaylord Nelson propuso una iniciativa ambiental donde miles de universidades participaron para la protección del medio ambiente. Así que, tomemos el Día de la Tierra como un llamado a reflexionar y concientizar a las personas del entorno sobre las crisis ambientales que está sufriendo el planeta, tal como lo intentan los científicos en estas manifestaciones. Es momento de reconocer a la Madre Tierra aludiendo cómo esta nos provee de todo lo necesario: agua, alimento y demás recursos importantes. Apreciemos y cuidemos el hermoso hogar que tenemos.